Según los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (CCPEEU), 26.9 millones de personas en los Estados Unidos actualmente viven con diabetes diagnosticada, mientras que se cree que otros 7.3 millones de personas padecen de diabetes sin contar con un diagnóstico. En total, esta cifra constituye el 10.5 % de la población de los EUA. Además, se cree que 88 millones de personas, una cifra abrumadora, padecen de prediabetes.
Con una prevalencia así de alta, es muy probable que las y los dentistas tengan pacientes con diabetes o prediabetes. Dado que existe una relación bidireccional entre la diabetes y la periodontitis, es importante que pongamos especial cuidado en informar a estos pacientes acerca de la importancia de la higiene y la salud bucal. Así, podemos brindarles información que les ayudará a mejorar sus resultados de salud bucal y sistémica y, quizá, reducir la carga de no uno sino dos grandes problemas de la salud pública.
La diabetes y la salud bucal
Por mucho tiempo, las y los dentistas han sabido que la diabetes aumenta el riesgo de padecer la enfermedad periodontal. Según la revista Diabetologia, las y los pacientes con diabetes tienen un riesgo de padecer de periodontitis tres veces mayor que las personas que no tienen la enfermedad. De hecho, en ocasiones la periodontitis se conoce como "la sexta complicación de la diabetes".
Recientemente, descubrimos que esta relación va en ambas direcciones. La periodontitis afecta el control glucémico de forma negativa al elevar la glucosa en la sangre y empeorar las complicaciones bucales y sistémicas en pacientes con diabetes.
Además de la gingivitis y la periodontitis, la diabetes está asociada con otros problemas de la salud bucal. La Asociación Dental Americana (American Dental Association, ADA) recomienda que durante los exámenes dentales se hagan revisiones y preguntas dirigidas acerca de los siguientes síntomas, que también pueden ser síntomas de una diabetes mal controlada:
- Sangrado
- Xerostomía
- Cambio en el sentido del gusto
- Sensación de ardor
- Infecciones bucales como la candidiasis
- Heridas que sanan lentamente
- Agrandamiento de las glándulas salivales parótidas
Esto quiere decir que usted podría encontrarse con señales y síntomas que podrían estar asociados con la diabetes en pacientes que tienen esta enfermedad sin saberlo. También es posible realizar un análisis de la glucosa en la sangre desde el consultorio dental. Si sospecha que su paciente tiene diabetes, es importante que le remita a una evaluación médica para que, en caso necesario, pueda recibir los cuidados médicos necesarios para tratar la enfermedad.
Cómo informar a sus pacientes acerca de la relación oral-sistémica
A menudo nuestros pacientes no saben que existe una relación bidireccional entre la salud bucal y la diabetes, y menos aún acerca de las posibles ramificaciones. Así, el primer paso es informar a su paciente.
Use lenguaje no técnico para explicar esta relación, diciendo, por ejemplo, "enfermedad de las encías" en lugar de "periodontitis".También puede usar herramientas educativas como videos, infografías o diapositivas como las que usa Mouth Healthy para explicar de forma accesible e interesante, por ejemplo, las complicaciones de la diabetes. También puede darles a sus pacientes recursos para llevarse a casa, como los folletos sobre Diabetes y su salud bucal (Diabetes and Your Oral Health) de la ADA.
Mejora de los cuidados personales
El tiempo que tenemos con nuestros pacientes en el consultorio es limitado, así que los logros más grandes se alcanzarán ayudándoles a mejorar sus comportamientos en casa. Haga énfasis en que una buena salud bucal marcará la diferencia y asegúrese de que su paciente tenga las herramientas necesarias para llevar a cabo una higiene bucal profunda en casa de manera regular.
Pídale a su paciente que le describa su rutina de cuidados orales (o, mejor aún, que se la muestre) y resalte aquello que podría mejorar. Recuerde que en ocasiones sus pacientes encubrirán sus malos hábitos, así que asegúrese de hablar del tema de forma sensible, comprensiva y sin juzgar.
También puede recomendarles productos de cuidado bucal que les puedan ayudar. El uso de cremas dentales antibacteriales es una manera efectiva de ayudar a reducir la placa y la gingivitis, además de otros problemas de la salud bucal. Además, podemos explicarles a nuestros pacientes que la gingivitis es la etapa inicial de la enfermedad de las encías y que se puede revertir antes de que se convierta en su forma más avanzada, la periodontitis, que implica la pérdida ósea alrededor de los dientes.
Las personas con diabetes podrían experimentar lesiones constantes del tejido blando que sanan lentamente. Usted puede enseñarle a su paciente a identificar estas lesiones en casa y decirles cuándo deben acudir al consultorio.
Por último, es importante recordar que el control de la diabetes es notablemente difícil y que requiere que las y los pacientes aprendan muchas cosas. En lugar de presentar los cuidados de la salud bucal como una tarea más que deben hacer, preséntelos como una forma de ayudarles a reducir las cargas de la diabetes y de tomar el control de las consecuencias a largo plazo. Cuando sus pacientes se sienten capaces y en control, es más probable que tengan la motivación suficiente como para invertir tiempo y energía en su salud bucal y general.